sábado, 12 de febrero de 2011

Mi sonrisa...



La soledad, es algo que siempre me ha llenado,la cercania de mi projimo, daba a mi vida, un matiz poco beneficioso.

Cuando me encontraba rodeado de gente, mis nervios se desataban, perdiendo mi propio horizonte, a menudo llegando incluso a desbarrar.

Asi pues empece a disipar esa neblina nacida en mi entorno, eliminando poco a poco a toda esa gente...que nadie se lleve a equivocos, esa gente no sufrio ningun daño, incluso creo que llegue con mi decision a liberarles de mi presencia. Yo odio a la gente, pero creo que ese odio se engendro ya en el pasado mas lejano, cuando con mi mente clarividente en aquellos años de infancia y adolescencia supe que realmente, que quien se acercara a mi, iva a sufrir ciertas molestias, que les haria a la larga sentirse, a disgusto a mi lado.

Ahora, tal vez aunque crean los que "cuidan" de mi en este lobrego nido, que me he sentir solo, es en verdad la unica vez en mi vida, que tengo lo que quiero...

Anoche sumido en esos pensamientos, con la unica luz que los reflejos de una enorme Luna llena, colandose por mi pequeña ventana enrrejada, me di cuenta, de una cosa...esto no es un encierro, es en realidad una liberacion, ya que apenas veo a nadie, ni tan siquiera participo en las terapias de grupo, eso no esta hecho para mi. Al principio fui casi obligado a asistir a ellas, pero los siquiatras que llevan mi caso, se dieron cuenta, de que mi presencia era nociva, para el resto de los pacientes, librandome asi de esa desagradable situacion.

Con esa conclusion, deje que el sueño me invadiera, ha sido un sueño, dulce como el de un niño de corta edad, y ahora cuando despierto con la timida luz de una fria mañana de invierno, una sonrisa ilumina mi rostro, algo que ultimamente, parecia imposible.