Las ruedas de la camilla golpean el frio suelo, del largo pasillo, me duelen las sienes, mis manos y pies estan inmovilizados,(como me temen, pienso...), aunque en el estado en que me encuentro, ni tan siquiera me aguantaria de pie.
Los internos, que me llevan se paran frente a la puerta de mi celda, ellos le llaman habitacion...una vez dentro trasladan mi dolorido cuerpo hasta esa cama de blancos barrotes, previamente me han liberado de mis ataduras, y siempre vigilantes me abandonan cerrando la puerta tras ellos, en ningun momento me han dado la espalda, se les nota tensos con miedo. Recuerdo que solo una vez intente escapar, ya nunca lo volvere hacer, pues tras la fuerte sedacion que me administraron, estuve realmente al borde del abismo.
Ahora solo entre esas cuatro paredes apenas puedo poner mis ideas en claro, siempre que recibo mi dosis de terapia convulsiva, suele ocurrirme.
A lo lejos, desde algun rincon del hospital se oyen risas y gritos, algunos bociferan !!!FELIZ 2011!!!
Pero yo solo llego a pensar entre las brumas de mi maltrecho cerebro, tras esas sesion de "electroshoks" :
"De que forma mas especial, he celebrado la entrada del nuevo año"
